Una vez acabada la evaluación inicial y visto de qué nos acordamos, qué se nos ha olvidado, qué tenemos que reforzar y de dónde debemos partir, han llegado las fiestas del Pilar. En tres años trabajamos los cabezudos, en cuatro años trabajamos el vocabulario específico de fiestas y este año, los gigantes. Con ellos estamos aprendiendo cosas de los personajes a quien representan y nos está resultando un trabajo muy interesante.
Desde aquí os invito a que, en algún momento, llevéis a vuestros hijos a verlos de cerca. Sería un broche de oro para el final de este trabajo. Así mismo, os deseo Felices Fiestas.
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